El anuncio del gobierno mexicano de que los jóvenes brigadistas (ciervos de la nación) sean vacunados junto con los médicos de primera línea y los adultos de 60 años y mayores en la primera fase de vacunación, abre el dilema de a quién vacunar primero.
Debido a que Covid-19 es especialmente letal para los mayores de 65 años y aquellos con problemas de salud como la obesidad, la diabetes o el asma; y, sin embargo, se propaga rápidamente y ampliamente por adultos jóvenes sanos que son más propensos a recuperarse, los científicos de datos se enfrentan a dos prioridades al modelar la aplicación de vacunas: ¿Se debe disminuir muertes o desacelerar la transmisión?
El consenso entre la mayoría de los científicos de datos es que, si el objetivo principal es reducir las tasas de mortalidad, se deben priorizar la vacunación de los mayores, y si quieren una transmisión lenta, deben dirigirse a los adultos más jóvenes.
Por otro lado, la velocidad de vacunación en México es preocupantemente lenta. (Ver la infografía y comparar con letalidad.)
¿A quién vacunar primero en México? ¿Tiene sentido poner a los brigadistas en la primera fase de la vacunación en un país como México con una de las prevalencias más grandes de diabetes en el mundo?