Inteligencia Artificial: la clave para el desarrollo de la acuicultura

La intuición, la experiencia y los consejos de boca a boca tradicionalmente han formado parte del desarrollo de la acuicultura, pero avances tecnológicos como los sistemas de inteligencia artificial, machine learning y analítica de datos cada vez toman más relevancia para reemplazar las metodologías antiguas.

Actualmente, la acuicultura juega un rol clave para la alimentación de 3 mil millones de personas y, dado que los peces tienen una baja huella de carbono en comparación con otras fuentes de proteína animal, el desarrollo inteligente y sustentable de esta industria adquiere cada vez más importancia para el futuro de la humanidad.

Así, países como Japón, Singapur, India, Chile, Alemania y México, por mencionar algunos, han integrado paulatinamente la tecnología avanzada dentro del sector con el fin de mejorar sus operaciones, aumentar la productividad y ahorrar recursos.

En primer lugar, los sistemas de inteligencia artificial permiten que los productores tengan una mayor visibilidad y conocimiento de lo que pasa bajo el agua; por ejemplo, el proyecto Tidal, desarrollado por Google, utiliza sistemas de cámara submarinas y herramientas de reconocimiento facial para monitorear a los peces, analizar su comportamiento y detectar posibles enfermedades.

Por otro lado, el machine learning para empresas dedicadas a cultivar salmón, camarón y otro tipo de peces de gran consumo, ha desarrollado soluciones para su alimentación. Estos sistemas aprenden las tendencias y apetitos de cada especie, e identifican cuál es el mejor volumen de alimento que necesitan y en qué momento deben suministrarlo.

UMITRON CELL es uno de estos alimentadores inteligentes de peces, con capacidad de administrar y controlar 400 kg de alimento de forma remota, lo cual permite que los productores no tengan que visitar las jaulas de peces todos los días. Además, su algoritmo de aprendizaje automático basado en IA, llamado Índice de Apetito de Peces (Fish Appetite Index, FAI), les permite saber si sus peces están hambrientos o satisfechos.

Otro ejemplo es el de Atarraya Inc., empresa mexicana con más de 10 años de experiencia ayudando a los camaronicultores, que utiliza tecnología de aprendizaje automático e inteligencia artificial para predecir y detectar enfermedades, además de mejorar la calidad del ecosistema microbiano y utilizar menos agua en comparación con el cultivo tradicional.

Este tipo de innovaciones tecnológicas dentro del sector acuícola incluso están llamando la atención de las nuevas generaciones. En el Innovators Under 35 Summit Europe 2018, la revista MIT Technology Review incluyó en su ranking de 35 jóvenes más innovadores y talentosos de Europa a Pieter Fabry, quien diseñó algoritmos de inteligencia artificial para optimizar el proceso de alimentación en la acuicultura y que sea más sustentable.

Uno de los desafíos que enfrenta la implementación tecnológica dentro de la industria es que los productores necesitan ser guiados para adoptarla, y así no sentirse abrumados por la gran cantidad de datos que tendrán. No obstante, con una metodología aterrizada y simplificada podrán aprovechar la información al máximo y tomar las mejores decisiones.

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